El cambio climático es un problema que ocurre en presente. A pesar de que cada vez reciclamos más y somos más conscientes del problema, todavía no es suficiente. Y es que enseñar a reciclar es una tarea indispensable.
Los datos hablan por sí solos. La mayoría de la población genera 2 kilos de basura diaria, aproximadamente media tonelada al año. Además, durante el año 2020, España incumplió el objetivo europeo de reciclar al menos el 50% de los residuos domésticos. Aparte de que esta cifra es insuficiente, es preocupante que pueda llegar a empeorar. Está claro que se necesitan medidas urgentes. Enseñar a reciclar y la importancia de esto, puede ser clave para el futuro.
Como en casi todo, se debe educar desde la base. Las últimas generaciones han sufrido el cambio climático de cerca, por lo que esta algo más implantado en sus días e interiorizado en sus prácticas, pero no hay que olvidar que son el futuro. Aquellos en los que sembrar la semilla de hoy que florecerá mañana. Una inversión a largo plazo para un futuro mejor. Pero, ¿cómo podemos concienciar a los más pequeños?
Aprender jugando es uno de los métodos más fáciles. Por ello, crear una tabla de puntuaciones que premie cada cosa que reciclen, les hará querer hacerlo bien. Por otro lado, es necesario, también que sepan que contenedor pertenece a cada residuo, por ello se pueden realizar juegos de colorear, cortar y pegar y tener siempre a su disposición los contenedores reales. Cuando, además estos sean de colores y están a su altura, será mucho más fácil para ellos y se sentirán preparados para reciclar. Como, por ejemplo, estos cubos de colores que podrás encontrar en nuestra web. Gracias a ellos podrán participar el la separación de residuos ya que tienen el tamaño perfecto.
Por otro lado, enseñar la regla de las 3R, jugando a reutilizar envases: reducir, reutilizar y reciclar. Crear juguetes con residuos como calcetines, cajas de zapatos o envases, además de divertido, les ayudará a desarrollar su creatividad y a aprender sobre las propiedades de los distintos materiales. Y, por supuesto, predicar con el ejemplo. Crear conciencia de la importancia de reciclar no consiste únicamente en decirlo, sino en ponerle remedio. Los más pequeños repiten lo que ven, por ello no hay mejor lección que reciclar. Comienza a utilizar distintos cubos para reciclar y notarás la diferencia.